(... puertas con alma) ISLA DE PASCUA


“Tepito Ote Henua” (“Ombligo del Mundo”), es como llamaban a la Isla de Pascua sus antiguos habitantes. Es la isla habitada más remota del planeta. No hay otra porción de tierra en el mundo tan aislada en el mar y esa misma condición le otorga un aura de fascinante misterio. También la llamaron  "Mata ki te rangi" («Ojos que miran al cielo»). La denominación de Rapa Nui se hizo posteriormente extensiva en otros idiomas para denominar al pueblo aborigen y a su idioma, pero como una única palabra, «rapanui». La isla de Pascua ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, dado el tesoro cargado de misterio que encierra. Se encuentra a 3 760 km de las costas de Chile.




El conocer los míticos Moái es un momento único en la vida de cualquier viajero. Las inmensas esculturas, esparcidas por el paisaje, crean una presencia mágica y envolvente, pero no son la única cosa de la isla que merece la pena destacar. Este entorno está lleno de playas, desiertos y magníficos volcanes durmientes. La isla está muy bien conservada y sus habitantes locales son los que se encargan de gestionar el turismo. A solo unos metros del centro de la ciudad, Ahu Tahai es uno de los mejores lugares para admirar la puesta de sol en la Isla de Pascua. ¡Todo es simplemente magnífico!  La isla de Rapa Nui  posee esa atmósfera mística que poseen muy pocos lugares en el mundo y que se puede apreciar desde que llegas a esta "puerta con alma". No se parece a ningún otro lugar de nuestro planeta. Este trocito de tierra es un misterio en el corazón del océano Pacífico.


Se estima que los primeros habitantes de Rapa Nui llegaron desde las Islas Marquesas en el siglo VI y que durante más de mil años no tuvieron contacto con el exterior. Eso hasta que el domingo de Pascua de 1722 fue descubierta para el mundo occidental por el navegante holandés Jakob Roggeveen, quien describió a los rapanui como “un sutil pueblo de mujeres hermosas y hombres amables”.Los encantadores habitantes de la Isla de Pascua te ponen un collar de flores a tu llegada y te ofrecen un cóctel de bienvenida. ¡Como si estuvieras en Tahití! pero no nos encontramos en una isla paradisíaca sino en un banco de rocas volcánicas azotadas por el viento y en el que se concentran numerosos yacimientos arqueológicos. Además " Los moáis" son los guardianes de la isla, esas impresionantes estatuas de toba y basalto que todavía encierran muchos secretos.






... Isla de Pascua,... cuna de misterios y volcanes dormidos





Parque Nacional de Rapanui (Isla de Pascua)

Parque Nacional de Rapanui, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco, y que tiene de todo y para todos. El parque nacional Rapa Nui de la República de Chile, administrado por Conaf desde 1972, comprende poco más del 40 % de la superficie de isla de Pascua, y fue creado en 1966. Abarca 7130 hectáreas, y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en diciembre de 1995.Adquirió esta categoría el 16 de enero de 1935.  Se divide en 9 paños independientes considerando a los islotes (Motus) como uno solo. La isla es de origen volcánico de forma triangular, con numerosos cráteres volcánicos y su vegetación es escasa, compuesta por diversos arbustos y algunos bosques artificiales, sobre todo de Eucalyptus.


Playa de Ovahe (Isla de Pascua)
Ovahe. Playa con arenas de color rosa, como la de Ovahe, Si caminas hacia el este encontrarás la playa de Ovahe, con curiosas arenas rosadas y un abrupto farellón que cae al mar (no es apta para el baño). La playa Ovahe es la segunda playa de Isla de Pascua, pero a diferencia de Anakena es mucho más pequeña y bastante menos frecuentada, por lo que es un paraíso que casi se puede tener para uno solo. Se trata de una caleta pequeña con un mar color turquesa y arenas rosadas producto de la mezcla de la escoria roja volcánica y el coral blanco, rodeada por acantilados de color rojizo. Aquí, la luminosidad en sus aguas es todavía mayor que en Anakena, por lo que es incluso mejor  para practicar snorkel. Para llegar a esta joya casi oculta, hay que seguir la carretera que va a Anakena. Más o menos un kilómetro antes de llegar, tomar el camino de tierra que se abre a la derecha y que indica Ovahe, y finalmente tomar el sendero que surge al pasar una colina prominente a la izquierda. Un muro de piedra indica la entrada a esta playa. Los tours organizados no contemplan la visita a este sitio. Es conveniente ir por la mañana, ya que Ovahe está rodeada de acantilados y el sol sólo da hasta aproximadamente las dos de la tarde.



Playa de Anakena (Isla de Pascua)

Anakena. Playa de encanto paradisíaco como la de Anakena,   No se puede estar en Rapa Nui y no visitar Anakena, la playa donde tocaron tierra las primeras embarcaciones de la migración polinésica para colonizar la isla y donde se asentaron los primeros habitantes. Anakena no sólo encanta por sus aguas cálidas y quietas de color turquesa, sus arenas coralinas blancas y sus palmeras –traídas desde Tahiti en los años ’60-, sino por el carácter único que le dan sus dos Ahus y sus respectivos moais. La playa está a unos 18 kilómetros de Hanga Roa, en dirección noreste y hasta ella hay que llegar necesariamente en auto alquilado o en taxi. Es la única playa de la isla oficialmente apta para el baño, aunque los rapanui prefieren nadar y bucear en las piscinas naturales que se forman entre las rocas en otros sectores, accesibles sólo para conocedores.


Playa de Hanga Roa. (Isla de Pascua)

Hanga Roa. Es la ciudad principal de la isla. En Hanga Roa está la mayoría de los hoteles, restaurantes, bares y discotecas de Isla de Pascua. Cuenta con dos bancos, tiendas de artesanías, supermercado, galerías de arte, estación de gasolina, negocios para alquiler de automóviles y motos y un punto de información turística. Hanga Roa se puede recorrer fácilmente a pie, con la incesante compañía de la brisa del mar. La avenida principal y que acumula la mayor parte del comercio es Policarpo Toro –en honor al comandante que tomó posesión de la isla a nombre de Chile–, pero vale la pena internarse por las callecitas aledañas que siempre guardan alguna sorpresa para los impulsos gastronómicos o de compras.

La Caleta de Hanga Roa (Isla de Pascua)
La Caleta. Un punto atractivo es la caleta, donde encontrarás varias escuelas de buceo, un par de restaurantes y una buena heladería-café con vista al mar. Además, cada tanto aparece una tortuga marina curiosa a buscar alimento en la superficie.


Casas del "Pueblo de Orongo" (Isla de Pascua)

Pueblo de Orongo. Cuna del dios Make-Make y de la ceremonia del hombre-pájaro. Es la aldea ceremonial compuesta de un conjunto de 53 casas construidas con piedras planas, pero hay además en ella rocas con petroglifos que simbolizan la fertilidad, el hombre pájaro y el Make Make, la gran divinidad para la cultura rapanui. Tras la crisis que sumió al pueblo rapanui en guerras tribales, la sociedad isleña se reorganizó a través del culto al hombre pájaro. Cada familia enviaba a uno de sus hombres, que representaba al jefe del linaje, para competir en la osada búsqueda del huevo del Manutara, un ave migratoria que anidaba en los islotes cercanos, los que podrás ver desde la aldea ceremonial de Orongo. Aquí, los competidores debían descender por el acantilado, nadar –a veces entre tiburones– hasta el islote de Motu Nui, buscar el primer huevo del ave y traerlo intacto de vuelta a Orongo para entregarlo al rey. Quien lograba ser el primero en llevar a buen término la proeza era investido Tangata Manu (hombre-pájaro) y adquiría para su tribu privilegios especiales.



Mercado de artesanías de Hanga Roa (Isla de Pascua)

Mercado de artesanías de Hanga Roa, con una amplia variedad de objetos trabajados por artesanos locales y de otros lugares de la Polinesia. 




Parroquia Santa Cruz. Vale la pena un vistazo por sus figuras de la tradición católica talladas en madera con el inconfundible sello rapanui. Los domingos, a las 9 de la mañana, se realiza una misa con cantos en lengua rapanui y ornamentos locales.



"La Tapati" (Isla de Pascua)

La Tapati. Cada mes de febrero, la vuelta a las raíces alcanza su punto máximo en laTapati, una fiesta de dos semanas cuyo corazón son las tradiciones y donde los rapanuise pintan el cuerpo como lo hacían sus ancestros, compiten en pruebas asombrosas, cantan, bailan y eligen a su reina.




Volcán Rano Kao (Isla de Pascua)

Volcán Rano Kao  Su cráter alberga un lago de casi 200 metros de profundidad. Para llegar a Orongo, el paso obligado es el cráter del volcán Rano Kau, que tiene 1,6 km de diámetro y 200 metros de profundidad y cuya forma recortada sobre el mar simplemente sobrecoge. En su interior, el cráter alberga una laguna y una suerte de invernadero natural con mahute, helechos, makoi, nahe nahe y otras especies, gracias a su particular microclima. Definitivamente un lugar para la contemplación.


Volcán Rano Raraku (Isla de Pascua)

Volcán Rano Raraku. Es la auténtica cantera a cielo abierto en la que se tallaron los moái. El volcán Ranu Raraku está a unos 20 kilómetros de Hanga Roa, en el vértice opuesto de la isla, y es la cuna de los moais. Es un volcán formado a partir de la actividad del Maunga Terevaka y dado que sus rocas son de menor dureza, fue el sitio escogido por los rapanui para tallar sus monumentales estatuas de piedra. Es uno de los puntos más atractivos de las isla, tanto para los turistas como para los investigadores, por los más de 300 moais de diferentes tamaños y en distintos estadios de tallado que se encuentran dispersos en sus laderas. El tallado se hacía directamente en la pared de la cantera y luego los moais eran trasladados a los distintos Ahu o centros ceremoniales.Tras las guerras tribales, el trabajo en la cantera se detuvo, y los moais quedaron allí, erguidos o tumbados, a medio terminar o transportar, y comenzaron a ser cubiertos por la naturaleza, por lo que algunos están semienterrados. Como en todos los lugares donde hay moais, vale la pena fijarse en la diferencia de tamaño y de facciones. Uno de los más curiosos es un moai que parece estar arrodillado. En torno a él hay varias versiones: unos dicen que representaría a un sacerdote, otros que sería un ancestro que vigilaría la cantera y velaría por las futuras generaciones de talladores. También está allí el moai más grande de la isla. Tiene 21, 6 metros de largo y yace sobre su espalda, a medio tallar, aún unido a la roca base de la cantera. El cráter del volcán es ovalado y en su interior hay una laguna de agua dulce, rodeada de vegetación nativa, especialmente juncos y totoras. Hacia ella dirigen la mirada varias decenas de moais desde la ladera interior.



Museo Antropológico Sebastián Englert (Isla de Pascua)

Museo Antropológico Sebastián Englert (Isla de Pascua)
Museo antropológico Sebastián Englert; El Museo Antropológico toma su nombre del sacerdote alemán que durante 30 años realizó labores misioneras y científicas en la isla. El museo recopila, conserva e investiga la herencia patrimonial deRapa Nui y su pueblo, y alberga una interesante colección arqueológica y bibliográfica.



Cuevas Ana Te Pahu (Isla de Pascua)

Cuevas Ana Te Pahu. Las erupciones volcánicas que dieron origen a la Isla de Pascua, crearon canales de lava que se extienden a lo largo de toda la isla. Ana Te Pahu es un canal que corre a lo largo de 7 km, ubicado en las faldas del Maunga Terevaka, en la costa occidental, a medio camino entre Ahu Akivi y Ahu Te Peu. La amplitud de esta cueva la hizo ideal para vivir en tiempos primitivos, pero también fue usada como refugio en tiempos de enfrentamientos tribales e incluso para esconderse de los esclavistas que llegaron a mediados del siglo XIX. Uno de los nombres por los que se conoce a esta cueva es “la cueva de los plátanos” debido a que se plantaron gran cantidad de estos árboles en la entrada. Bajando los escalones que dan acceso a la cueva, se puede seguir por la izquierda, cruzando las plantaciones de plátanos y taros y avanzar algunos cientos de metros. El camino de la derecha lleva a la cueva principal donde, si se continúa un poco, puede verse un horno de estilo polinesio. Gracias a las varias aberturas naturales de la cueva, sus habitantes pudieron cocinar en su interior sin que el humo se acumulara dentro. Es posible seguir avanzando por el interior de la cueva pero será necesario llevar una linterna y calzado adecuado, el camino no es demasiado complicado pero puede ser resbaladizo cuando ha llovido.




Cabeza de Moai en el Yacimiento de Ahu Te Peu (Isla de Pascua)

Manavais (Isla de Pascua)
Yacimiento de Ahu Te Peu. El área de Ahu Te Peu, ubicada a unos 8 km de Hanga Roa, es una zona de alto valor arqueológico, donde en su día existió una aldea de gran tamaño. Se trata de un lugar enclavado en un paisaje fascinante, junto a los acantilados, al que llegan muy pocos visitantes, por lo que la sensación de soledad y aislamiento es sobrecogedora. Nada ha sido restaurado aquí, por lo que el lugar conserva todo su valor histórico para los estudiosos (este se pierde una vez que se reconstruye) de la cultura Rapa Nui. En la parte más cercana a la carretera se pueden distinguir varios manavais (círculos de piedra en cuyo interior se cultivaba), los restos de algunas casas-bote elípticas, o hare paengas, y un único hare moa (gallinero) a la izquierda. Un sendero pequeño que se dirige a la derecha conduce a una de las casas-bote más grande que se ha descubierto. Mide 40 metros de largo y se piensa que, a diferencia de las otras que servían exclusivamente para dormir, esta era usada como un hare nui(casa grande) donde se celebraban reuniones.Desde el frente de la plataforma, que en su día tuvo 70 metros de largo por 3 de ancho, pueden verse varios torsos y cabezas de moais destruidos, así como fragmentos de tocados rojos. La parte trasera del ahu muestra un fino trabajo de tallado en el muro posterior, aunque no con los niveles de perfección encontrados en Vinapu. Lamentablemente la parte izquierda de la plataforma se desmoronó durante los trabajos de excavación que realizó aquí Thor Heyerdahl en 1955, que desestabilizaron los cimientos. Vista por detrás, da la impresión de que en realidad se trató no de una, sino de dos plataformas. La mejor iluminación para apreciar este yacimiento se obtiene por las mañanas.




Moais con "pukaos rojos" (Isla de Pascua)

Pukaos rojos  Varios estudios han contabilizado 58 moais con un extraño tocado de color rojo sobre la cabeza. Reciben el nombre de pukaos, tienen forma cilíndrica y están hechos de escoria roja procedente de la cantera de Puna Pau, un pequeño volcán próximo a Hanga Roa. Se cree que representa el pelo amarrado en un moño y teñido de ocre, tal como era la costumbre polinésica y que aún puede observarse. En la propia cantera, o en transporte, quedaron abandonados 31 pukaos. Las dimensiones de estos cilindros alcanzaban entre uno y dos metros de alto, por dos a tres metros de diámetro, con pesos de entre nueve y veinte toneladas. Fueron la máxima expresión del poder de algunos linajes, y en un extraordinario alarde de ingeniería y poder político, levantaron sobre el moai del Ahu Te Pito Kura, a 10 metros de altura, un cilindro de escoria que pudo pesar más de diez toneladas.



Anticuchos (Isla de Pascua)

Gastronomía. Por la noche, lo mejor es disfrutar del marisco. En el acceso a Anakena hay pequeños kioscos atendidos por familias rapanui, con algunas mesas y bancas bajo la sombra, donde se puede disfrutar de una cerveza, una empanada de queso o de atún o un anticucho. También puede probar aquí el poe, una especie de budín dulce, preparado con harina, zapallo y plátano. Si tiene tiempo y vehículo asegurado para regresar, permítase el lujo de esperar allí que caiga la noche y aparezcan las estrellas. La atmósfera es encantadora.






... Si quieres visitar la isla de Pascua, 
es aconsejable hacer coincidir tu viaje 
en febrero, con el festival Tapati Rapa Nui. 




Además, ...
la gentileza de los habitantes de la Isla de Pascua 
no es solo una leyenda. 
¡Un viaje perfecto!





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